“Creer, soñar, arriesgar”
ARRAYANES
EL BARRIO
La barriada de Arrayanes está situada en la zona norte de la ciudad de Linares. Su población ronda los 8.000 habitantes, de clase media-baja, mayoritariamente jóvenes, con un nivel elevado de natalidad, lo que determina una importante presencia de población infantil. Al mismo tiempo, en los últimos años está aumentando el número de personas mayores.
La actividad económica y laboral se centra, en muchos casos, en empleos de carácter precario: venta ambulante, servicio doméstico, faenas agrícolas estacionales,… Las cifras de desempleo son muy elevadas y existe una fuerte presencia de economía sumergida lo que, unido a la dificultad para incorporarse a las redes de empleo normalizadas, genera, como única expectativa, el acceso a prestaciones económicas públicas de carácter asistencial.
A nivel educativo se constata una alta tasa de analfabetismo, además de fracaso escolar, absentismo y abandono precoz del itinerario educativo, ocasionado, en muchos casos, por la falta de motivación que se vive en las familias.
A todo esto se unen también problemas derivados del consumo y tráfico de drogas en la barriada.
En el ámbito sanitario existe un Centro de Salud que, además de ofrecer la atención médica ordinaria, trabaja por la promoción de hábitos saludables (alimentación equilibrada, salud sexual y reproductiva,…), así como por un uso correcto de la red sanitaria.
NUESTRA PRESENCIA
Desde los comienzos del Centro Cultural Poveda (1977) la preocupación por atender a las capas sociales más desfavorecidas de la ciudad ha sido una constante en su ideario y su actividad. Poco después de inaugurado se pusieron en marcha clases de refuerzo educativo para niños que no podían pagarlas, atendidas por voluntarios y más tarde se dieron los primeros pasos para constituir la Asociación “Linares Acoge” (hoy “Mundo Acoge”), de atención a los inmigrantes, se colaboró sistemáticamente con Cáritas en distintas iniciativas –se impulsó “Cáritas Joven”, entre otros proyectos–, …
Esta misma inquietud llevó a diseñar y llevar a cabo un estudio de la realidad socioeconómica de la ciudad a finales de la década de los 90 del siglo pasado, cuyas conclusiones incluían un plan de acción, que llevó pronto a poner la mirada en la barriada de Arrayanes, enormemente necesitada de atención socioeducativa. En el mencionado estudio ya se apuntaba la conveniencia de contar con una Asociación de carácter civil que facilitara su financiación y la inserción en las estructuras públicas, cuestión que suscitó un largo proceso de reflexión, culminado el 9 de junio de 2006 con la celebración, en la propia sede del Centro (desde entonces, también, domicilio social de la misma) de la Asamblea fundacional de la Asociación Socioeducativa y Cultural Poveda. Firman la misma catorce personas en calidad de socios promotores, todos ellos miembros del mencionado Centro Cultural y algunos, con tareas de responsabilidad en el mismo.
Apenas constituida la Asociación, la presencia en el barrio adquiere un carácter más sistemático.
Tras los primeros contactos con las Asociaciones de Vecinos, centros educativos y la parroquia del barrio, se comienzan a diseñar programas de intervención socioeducativa con la infancia/juventud y las mujeres en desventaja como principales destinatarios.
Así, desde entonces, y con la necesaria adaptación a las circunstancias, necesidades y posibilidades de intervención, se vienen ofreciendo actividades diversas para estos colectivos.
Tres son los objetivos prioritarios que guían la programación:
- La promoción personal y social de su población, ofreciendo ámbitos de encuentro y oportunidades de éxito que ayuden a descubrir las potencialidades de cada persona y ayuden a su empoderamiento y su inclusión social.
- El fortalecimiento del tejido social en el barrio, mediante el establecimiento de vías de colaboración entre las entidades públicas y de voluntariado que inciden el mismo.
- La apertura a otras realidades, con actividades y proyectos que trascienden el ámbito de la barriada e incluso de la localidad y estimulan el interés por el conocimiento.
Además, existe una presencia sistemática y permanente de la Asociación en el barrio, a través de personas que viven en el mismo y otras que trabajan en él en los ámbitos educativo y sanitario.